5 mitos sobre los créditos automotrices en México

Contrario a lo que muchos mexicanos piensan, través de créditos es una forma útil para hacerse de un patrimonio que de otra manera resultaría inalcanzable. Evidentemente, esta forma de poder contar con bienes aún sin haberlos liquidado en su totalidad, tiene un costo que, dependiendo de cada institución, puede sentirse como elevado o no.

Podríamos empezar por definir la diferencia entre algo que es caro y algo que cuesta mucho dinero, porque usualmente se confunden y definitivamente no son lo mismo.

Un crédito con una elevada tasa de interés es caro; en tanto que un crédito con una baja tasa de interés, pero con un capital inicial muy elevado, es algo que cuesta mucho dinero.

Una vez entendido esto, podemos continuar con el asunto que nos ocupa: Los mitos sobre el crédito automotriz.

Mucho se ha hablado de este tipo de financiamientos como algo ventajoso para la institución y subyugante para quien lo contrata. Nada mas falso; si partimos del punto de que pedir dinero ancestralmente ha tenido un costo, podemos calcular este costo dentro de los parámetros de lo justo.

1.Contratar créditos representa un sacrificio económico

Hace algunos años se manejaba esta sentencia porque las tasas de interés eran muy elevadas. Hoy, gracias a la entrada de nuevos actores en el mercado automotriz, esto ha cambiado. Las tasas son mucho más accesibles y el financiamiento en muchos casos es ofrecido por financieras pertenecientes a la misma armadora con la que se comprará el auto.

2. Algunos modelos son inalcanzables

Es una verdad implícita, que todos queremos el coche con el que hemos soñado toda la vida, pero antes de engancharnos con un autofinanciamiento debemos hacer un análisis de las finanzas personales, que en buena parte es el que genera la impresión de que algunos modelos son inalcanzables con autofinanciamiento.

Eso depende exclusivamente del porcentaje de nuestros ingresos que asignemos a la mensualidad de nuestro auto. Se deben considerar además gastos continuos que generará la adquisición, como tenencias, seguro, combustibles y mantenimientos. Para entender que no son inalcanzables, es necesario que la mensualidad no exceda el 30% de tu ingreso mensual.

3. Un crédito es sinónimo de una cartera vacía

Recurrir a este tipo de esquemas no es el reflejo de una crisis financiera personal, más bien debe considerarse como una facilidad que ofrecen algunas compañías para que tus finanzas tengan un colchón que de otra manera no sería posible.

Esto permite disfrutar de una tranquilidad que permita resolver cualquier imprevisto. Al día de hoy, más del 70% de los autos que se venden en México son adquiridos bajo este esquema.

4. El banco es el único que otorga créditos

Falso. Existen dos opciones para abrazar esta forma de financiamiento: Las instituciones bancarias y las sociedades financieras de objeto múltiple, que además ofrecen este esquema para la adquisición de otros bienes muebles e inmuebles o de las armadoras automotrices que a la postre, resultan más favorables por contar con ventajas que emanan de su situación inhouse.

5. Un enganche elevado es mejor

Aunque la lógica indica que entre más se paga de enganche, menos queda para cubrir en mensualidades, el desembolso de una fuerte cantidad redunda en una cartera vacía que te quitaría la oportunidad de responder ante una eventualidad personal.

Se recomienda como óptimo un enganche del 20% que puede reducir el plazo total del crédito y controla el monto de tus mensualidades, aunque esto, es meramente de gusto personal.

CUÉNTANOS…
¿Tú prefieres comprar un coche a crédito o de contado?
¿Qué beneficios destacarías de los créditos automotrices?